martes, 16 de noviembre de 2021

Tarta de calabaza y queso

    Una amiga, Valle, nos ha regalado tres calabazas con el fin de decorar el aula en la víspera de la fiesta de Halloween, y para aprovechar toda esa pulpa hemos seleccionado esta tarta. Aunque no tenemos costumbre de comerla, mezclada con  el queso y con una cobertura de chocolate, tenemos el éxito asegurado.



Ingredientes:

  • 600 g de queso crema
  • 180 g de azúcar blanco
  • 4 huevos medianos
  • 1 cucharada  de Maizena
  • 350 g  de calabaza asada,  unos 750 en crudo
  • 100 ml de nata 
  • 60 g de mantequilla 
  • 100 g de chocolate para  postres ( con un 70%  de cacao)



Preparación:

    Después de lavar y secar bien la calabaza, la cortamos en trozos y horneamos a 180º con calor arriba y abajo hasta  quedar tierna.



     Batimos el queso  obteniendo  un resultado cremoso.




    Incorporamos poco a poco el azúcar  y la Maizena;  y batimos hasta que se haya integrado por completo.


    Añadimos entonces los huevos. 


    Incorporamos la calabaza asada, y batimos de nuevo hasta que se haya disuelto por completo con la masa, que habrá  tomado un color más anaranjado.




    Para acabar, incluimos la nata y mezclamos de nuevo hasta que el resultado sea igualmente homogéneo.


    Cubrimos un molde de 20-22 cm con papel de hornear y vertemos la masa dentro. Lo introducimos en el horno a media altura y cocinamos entre 40 y 50 minutos, dependiendo de si se quiere más o menos cremosa. Cubrimos con papel de aluminio a partir de los 20 minutos para que no se queme por arriba.

 
    Cuando esté lista, apagamos el horno y, con la puerta entreabierta, dejamos enfriar de tres a cuanto horas dentro del mismo. 
    Cuando ya esté a temperatura ambiente, preparamos la cobertura: calentamos la nata en un cazo con el fuego medio y retiramos antes de que llegue a ebullición, añadimos el chocolate poco a poco sin dejar de remover hasta que se haya disuelto por completo y añadimos  entonces la mantequilla, que le dará brillo. La vertemos con cuidado por encima de la tarta y dejamos que se enfrié del todo. Una vez fría, la conservamos  en la nevera.



   
    Por último la decoramos para la ocasión.




 Terroríficamente deliciosa!!!


 
 
 
 
 
 
  



 
 

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