lunes, 23 de mayo de 2022

Pestiños

     Los pestiños son un dulce tipico de Semana Santa, aunque también se comen en Carnaval, Cuaresma y Navidad

        Son tradicionales del sur de España: Andalucía, Murcia y Extremadura. Su origen es antiguo, ya se encuentran referencias en la literatura en el siglo XVI, pero es posible que sean más antiguos aún. 

    Los pestiños también son una receta de la cocina árabe. Se consumen en época de ramadán para romper el ayuno, porque son muy calóricos.

Ingrendientes:

  • 250 ml de aceite.
  • 250 ml de vino blanco.
  • Canela.
  • Azúcar.
  • 2 cucharadas de anís en grano.
  • 1 cucharadita de clavo.
  • 2 cuchadaras de ajonjolí.
  • 1/2 cucharadita de  sal.
  • Ralladura de limón.
  • 1 piel de naranja.
  • 1 piel de limón.
  • 625 g de harina aproximadamente.

 

Elaboración:

    Comenzamos aromatizando el aceite de oliva. En una sartén  ponemos el aceite a fuego lento con la rama de canela y las pieles. Una vez que se han dorado, se retiran las pieles y se añaden los anises. Apagamos el fuego y dejamos que el aceite se enfríe a temperatura ambiente.

   Posteriormente tostamos el ajonjolí, y por último batimos el aceite con las semillas.

    También calentamos el vino con la sal para que quede bien disuelta.

 
       Y rallamos el limón. 

 
     En un cuenco grande ponemos la harina y agregamos el vino blanco, la sal, la  ralladura de limón y el aceite aromatizado. Mezclamos con una cuchara de madera hasta que cueste amasar. Este es el momento de irnos a la mesa y amasar, hasta que quede una masa elástica y sin que se nos pegue a las manos

    Dejamos la masa media hora cubierta con un paño.

    Vamos cogiendo bolitas de masa del tamaño de una nuez, las estiramos con el rodillo, tienen que quedar finas, y le hacemos unos cortes alargados en el centro.

    Freímos los pestiños en abundante aceite de oliva. 

    

   Pasamos a un papel de cocina para quitar el exceso de aceite.  Todavía calientes, los rebozamos en una mezcla de azúcar y canela.

 
 

    Y despues de pasar una fantástica mañana cocinando, desayunar este dulce andaluz es una auténtica delicia.


jueves, 19 de mayo de 2022

Torrijas

    Hoy vamos a preparar la receta tradicional del dulce más típico en Semana Santa, un postre humilde que está basado en una rebanada de pan.

Llaveros Nazareno de goma eva procesionando.
 

Historia y origen de las torrijas de leche.

    Las torrijas son uno de  los dulces más típicos de estas fechas, de los más conocidos y de los más antiguos podríamos decir.

    La receta de este dulce fue introducida en Europa por los árabes, variando a lo largo del tiempo su forma de  preparación. La encontramos con vino, con leche, con azúcar, con  miel...

    La palabra "torrija" aparece en el diccionario en el año 1591. Antes de este año se le había nombrado como torradas, rebanadas, sopas doradas... ya que su ingredientes principal era el pan.

 

 ¿ Por qué se comen  torrijas en Semana Santa?

    Las torrijas  son un alimento contundente y con bastantes calorías. Por lo que eran muy apropiadas para  los días de abstinencia. Durante esta fecha, las monjas de conventos aprovechaban el pan duro para  hacer diferentes elaboraciones y así poder alimentar a  los necesitados. Entre estas elaboraciones estaba la torrija. Tenían también un significado místico: la Resurrección de Jesús. El pan se identificaba con el cuerpo de Cristo, la fritura en aceite con el sufrimiento, y la leche y la miel con el resurgir y la esperanza.

    De aquí viene la tradición de comer torrijas en Semana Santa que se ha mantenido durante todos estos años.

 

Ingredientes:

  • Pan.
  • Leche.
  • Canela en rama.
  • Canela en polvo.
  • Azúcar.
  • Cáscara de limón.
  • Huevos.
  • Aceite.

 

Elaboración:

    Ayer compramos una chapata, es recomendable que el pan esté un poco endurecido.

    Ponemos en un cazo la leche, un poco de azúcar, una rama de canela y unas cáscaras de limón.

    Lo ponemos al fuego removiendo de vez en cuando para aromatizar la leche.  Cuando rompa a  hervir lo apartamos y tapamos la olla.

    Mientras la leche se calienta, cortamos  en rebanadas de unos 2 cm de grosor, la barra entera  de pan.

 

     Una vez que la leche  ha reposado  unos 10 minutos, la colamos en un plato hondo donde posteriormente iremos empapando las rebanadas de pan.

    Preparamos otro plato hondo y batimos los huevos.

    Calentamos la sartén con el aceite, a fuego fuerte para que las torrijas se hagan rápido y no se encharquen de aceite. Lo hemos aromatizado con unas pieles de limón antes de freír las torrijas en él, esto le dará un extra de sabor a las torrijas.

    Mientras tanto preparamos un tercer plato donde ponemos abundante azúcar con canela molida.

    Mojamos las rebanadas de pan en la leche, pasamos de la leche, escurriendo, al huevo batido. Escurrimos del huevo y las freímos. Doramos por cada lado y sacamos en un recipiente con un papel absorbente. Así hacemos con las demás.

    Por último las pasamos por la mezcla de azúcar y canela.


 

    Es un dulce tradicional con ingredientes básicos que está riquísimo.